jueves, 24 de septiembre de 2015

Quería volar

Bueno pues no sé si debería hacer entrada sobre éste libro puesto que no lo he acabado...

Lo cogí en la ebiblio, y como ya toca devolverlo pues que se lo lleven porque lo he intentado pero supongo que no me interesa el tema.

Habla de la bulimia y la anorexia, son varios testimonios de gente que ha pasado o está pasando por ello. Yo no pensaba que fuera a ser eso sino que se desarrollaría un testimonio y contaría la historia que pasó la escritora. Pero a parte de eso luego vienen una serie de testimonios que únicamente cuentan enfoques o puntos de vista, mantras para superar la enfermedad... Supongo que es un buen libro para quien padezca algo similar, una especie de "autoayuda".

Personalmente lo cogí para ver si lo que yo padecí podía haberse desarrollado en anorexia. Todo apunta a que sí, pero lo cierto es que tampoco necesitaba el libro para eso. Perder 10kg en unos meses cuando no se tiene sobrepeso y las ideas que me rondaban la cabeza de que era una mierda, que no valía para nada, que no era atractiva y nadie me querría jamás, creo que era un buen sustrato para acabar descarrilando. Tenía 18 años y me había dejado el novio por carta. Todo un valiente el tipo. Pero claro yo ya perdí el apetito al enamorarme, el nerviosismo y las mariposas me cerraban el estómago. Solo que vino seguido de todo lo contrario, tristeza, amargura y una bola en la garganta que a veces tampoco me dejaba respirar bien.

Comer comía pero sólo a mediodía y para cenar, y un solo plato, nada de postres, nada de pan, nada frito porque me daban arcadas solo de pensarlo. No era que quisiera adelgazar era que no podía comer. El problema es que adelgacé y me lo hicieron notar, y me gustó la idea, y hubiera seguido adelgazando si no fuera porque por fin alguien me quiso. Y si no hubiera llegado él, seguramente mi madre me hubiera puesto a andar, en cuanto la cosa se le pasara de castaño oscuro. Pero como yo nunca vomité ni tuve hábitos raros, y comía siempre en casa delante de ella, se conformaba con que comiera lo que me servía. Creo que lo hizo bien, es posible que si me forzara y me hiciera pasar malos ratos con la comida habría acabado provocándome el vómito como fuera.

El libro lo poco que leí, que no llegué a la mitad...me gustó al principio pero luego ya empezó a aburrirme. Supongo que está bien como digo para quién padezca de un trastorno alimentario o quien tenga cerca a alguien con él porque seguro que les ayuda mucho, pero como lectura de entretenimiento va a ser que a mi no me vale.


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