jueves, 4 de septiembre de 2014

"Repunante"

Repunante es el adjetivo que usa mi madre para definirme. Soy repunante porque no me ajunto con los aldeanos de mi quinta...claro no te jiba! A ver quién me deja entrar en su círculo de amigos con lo exquisitos que son en mi pueblo. Yo no lo valgo...de hecho valgo más, soy demasiado para ellos por eso me miran mal, y se tienen que poner de puntillas encima de un taburete para mirarme desde arriba y por encima del hombro. Bueno que yo no tengo estómago para tragar a esa gente, qué le voy a hacer?!

Soy repunante porque me parece chorriñoñas todo esto de las bodas y tal pascual...luego me emociono igual y me lo paso chupi si el ambiente mola claro, pero en un principio es un mal trago también, así que me paso meses rumiando "porqué tienen que hacer pasar al resto de seres vivientes por algo así...si ellos quieren toturarse que lo hagan pero que no salpiiiiiquen".

Soy repunante porque cuando una persona me dice algo bonito no sé encajarlo y me limito  a bromear sobre el asunto, o estropeo el momento con alguna escatología de la mías, o critico el gesto romántico de la pareja de turno.

Bueno pues esto último he querido cambiarlo, primero porque me lo propuse hace tiempo, y segundo porque ya me dieron un corte que a pesar de ser por escrito y quizá haber sido menos de lo que yo supuse me hizo recapacitar. Así que me encuentro el otro día con mis amigas contando el asunto del desayuno con berlinesas y salta una "ya estamos! es que mira que sois rancias (es que en el grupo hay otra como yo), que lo hace con todo el amor del mundo joder!". Le tuve que explicar que antes de hablar escuchara, que yo lo decía en plan bien, por una vez en mi vida. Es que vamos a tener que ponerle un bozal, no contenta con eso siguió "No, es que como tú y ésta siempre criticáis y parece que os molestan esos detalles..." Vale que me lo dijera a mi pero "ésta" estaba con su pareja presente...

Iba a dejar de ser repunante para las bodas pero "ésta" nos comunicó en esa reunión especial que se casa y sinceramente...me da por saco. Me alegro por ellos, guay, que sean felices, pero no me apetece gastarme dinero en despedidas ni en regalos de boda, sé que me lo voy a pasar requetebién, y hasta lloraré, fijo fijo, pero nada, que no me ilusiona. Y a mi se me han acabado las ideas para bromas y despedidas, a parte no me mola eso de tener que organizar entre un rebaño que al final nadie se pone de acuerdo, y alguien tiene que ser el perro pastor y nadie quiere...bufff que me estoy rallando solo de pensarlo.

Lo dicho...REPUNANTE!