miércoles, 20 de noviembre de 2013

Mis amiérdalas

Os tengo que hablar de mis amigas amiérdalas, o miérdalas...más conocidas por los médicos como amígdalas. Yo les he puesto un mote cariñoso porque me han hecho feliz...muchas veces...

No quiero insultarlas porque las pobres no se pueden defender pero contenta me han tenido. Se han traído unos bailes a lo largo de mi vida que a punto estuve de echarlas para siempre jamás de la casa que les presto.

Las conocí de pequeña...con unos 7 años, cuando un buen día les dió por bailar flamenco y se vistieron muy monas ellas con vestidos de lunares blancos:

Ay por Thor! Ese día se me olvidó afeitarme el bigote!
Me dolía mucho la garganta, me costaba tragar saliva, y hablar...cuanto menos mejor, lo único que me aliviaba eran las bebidas o comidas hirviendo...se ve que escaldarlas les jodía la fiesta.

Desde aquella no sé cuántas mierdalitis tuve, o ferias de abril porque menuda fiesta...fiebre, dolor insoportable... Entre los 16 y 19 años estuve que era un no parar, no me dejaban en paz, claro que yo también empecé a ir de fiesta en fiesta y me despendolé en aquellos años. Hasta empecé a fumar...ya ves qué tontería, se ve que ellas se animaban con el humo. El verano de mis 18 lo pasé empastillada, me dejaban descansar un par de semanas y luego una semana entera fiesta y así sucesivamente. Ya no me daban fiebre, al menos no siempre, pero el dolor era tan insoportable que el día que se me olvidó tomar la pastilla antes de ir a dormir a la mañana siguiente se me caían las lágrimas del dolor y la puñetera impotencia de no saber qué hacer con aquello. Porque claro en la seguridad social lo que me dijeron fue "si no tienes más de 7 crisis al año con fiebre no te echamos a las amigas de casa". Algo así como pasa con los arrendamientos que como alquiles un piso, tu inquilino puede pasar 7 meses sin pagar que tiene todas las de ganar y quedarse ahí cual parásito, que nadie hace nada. Pues esto igual. Salí de la consulta llorando porque 7 crisis con fiebre no, pero 14 sin fiebre pero casi sin poder comer sí. El médico de cabecera me hizo la prueba del aslo... o del asno ya ni sé, porque algo asna sí que era de aquella, bueno y ahora. Resulta que si tenía que tener 100 tenía 300. Así que me recetó unas pastillas para bajar eso. Empastillada más de un año estuve, vamos que cuando cumplí los 18 con la ilusión que me hacía donar sangre, me echaron como a una apestada porque tomaba la mierda esa. Después de más de un año tomando esa basura que nunca consiguió bajarme el aslo a un nivel normal pasé del tema olímpicamente, sobretodo cuando un médico sustituto y joven me dijo que esa prueba ya no se solía hacer hoy en día y menos en gente de mi edad porque lo más normal es que la cosa estuviera fuera de los baremos establecidos así en general...supongo que eso de andarnos metiendo la lengua unos a otros hacía aumentar esos anticuerpos, o el simple hecho de estar aglomerados entre cuatro paredes en manada la mayor parte del día, o salir en tirantitos en pleno diciembre...esas cosas de jóvenes. Así que dejé la medicación (qué bien suena eso) y fui a donar sangre. No sé si fue eso, o fue que mis miérdalas asentaron la cabeza...pero dejaron de darme tanto la lata.

Sí yo creo que asentaron la cabeza porque ya se vistieron de blanco total...supongo que pretendían casarse de esta guisa:

Esto fue tras unos días de ligera fiesta, tan ligera que ni miré a ver que andaban tramando, solo tenía una ligera irritación de garganta que podía aliviar con caramelitos o infusiones...Hasta el día que abrí la boca frente al espejo y las vi, y les eché el broncazo. Cómo se iban a casar así tan pronto?! Antes que yo! No, no. Me fui a urgencias, la que me atendió me puso el termómetro porque no se creía que con eso así casi tirando a verde pudiera estar tan fresca como una lechuga y sin dolor porque tras la irritación que tuve días antes ya no me volvió a doler. Pues se quedó de culo y llamó a un compañero para que viera a la mutante que tenía delante. Total, antibióticos y pas casa.

Y desde aquella así ando, que tengo que andar vigilándolas cada poco a nada que noto como algo pegado ahí al fondo porque sino no me entero.

La última vez fue justo antes de irme a la carrera de la ciencia en Madrid. Decidí ir al médico y que me diera los antibióticos...no los tomaría, porque aún no estaba la cosa muy desmadrada, si se desmadraba pues los tendría a mano. Preferí hacer caso de algo que vi por internet...sí sí no se debe hacer caso de lo que se ve por la red pero nunca se sabe, ademas se trataba de algo natural e inócuo, ajo y limón. Prensar un ajo, echar unas gotas de zumo de limón coger un bastoncillo de los oídos, mojarlo en el mejunje ese y frotar las amigdalas con eso. Sí, no es agradable, alguna gente será incapaz porque le darán arcadas pero yo lo conseguí, de hecho ya lo había intentado una vez pero con alcohol de desinfectar (también algo natural oye! pero no funcionó). Solo lo hice una noche, y luego hice gargaras en ayunas con zumo de limón, tb me lo bebí a palo seco...no sé si fue eso pero a los 4 días cuando me acordé de hacer una revisión...ya no tenía nada.

Ahora han vuelto, están preparando la feria de noviembre o algo, pero ya les di pal pelo, si funciona...lo patento!

10 comentarios:

  1. Yo también sufro mucho de eso,y es una lata, solo que por suerte los días de fiesta en mi caso disminuyen con los años. Ánimo y biquiños!

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    1. Sería una lata si sufriera...pero hoy en día lo peor de esto es cuando tengo que tomar los antibióticos, que sus efectos secundarios me fastidian un montón y no ayudan tampoco a evitar que la cosa vuelva alcabo de un mes. Bicos!

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  2. Nunca he sufrido de ese mal... y viendo las imágenes, afortunado me siento.

    Las curas de la abuela, hacen milagros. Para el dolor de cabeza, rodajas de patata cruda en la frente... mano de santo, tu!!!

    Beso.

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    1. Oye pues lo de las patatas lo había oído pero espero acordarme cuando me vuelva a doler...

      No es para tanto de hecho hoy en día para mi no es nada, antes era muy doloroso pero ahora...lo que digo que lo peor el antibiótico.

      Un beso

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  3. ¡Pero chica! ¡tú no tienes anginas, eso es contagioso incluso a través del blogger! y yo que creía que era mi hermana la poseedora de las amígdalas más grandes... ¡qué bárbaro! eso sí, tienes que haber generado anticuerpos para parar el 99 % de las infecciones.
    Salu2

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    1. Jjaja que no tengo anginas? Sí las tengo y ahora se curan solas en un plis plas...bueno no sé si es el mejunje, las infusiones de salvia, o el pasar de ellas olímpicamente y hacer vida normal. Mucha gente se pone bufandas, se tapa mucho, no toma nada frío...yo sin embargo puedo hasta tomar helados. Al final me he convertido en un extraterrestre, y cada vez que voy al médico por esto me miran raro al ver que no tengo fiebre ni dolor. Tengo anticuerpos hasta para tu hermana, los vendo baratos jajaja!

      Saludos!

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  4. Buf... que estoy empezando a sentirme mal... buf... (hipocondríaco)

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    1. Buf...no te sientas mal que no es para tanto jaja! Si te pones hipocondríaco con esto cómo te pondrías si hablara de no sé...SIDA? :P

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  5. Son unas anginas curiosas así sin dolor, que siempre he oído que dan unas molestias de garganta de aúpa, yo he tenido la suerte de no tener que padecerlas. Lo del ajo y el limón si que lo había oído, aunque hay que saber cuando aplicarlo, que luego puede ser fatal para las relaciones sociales, jajaja

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    1. Pues nada yo sigo con ellas ahí ahí que no se quieren emocionar mucho por si acabo atacando con antibióticos...pero la verdad que voy a tener que darle vidilla al asunto porque es posible que ya haya contagiado a una amiga. Lo del ajo...al que no le guste que no se me acerque!

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