Creo que voy a meter la frase donde me quepa. Es lo único que he podido escuchar de la esplendorosa actuación de Mistress Bottle of vino...mucho vino se ha debido tomar ella in the plaza mayor. Madrid llorando esa noche y yo con mi mister teta, pasándomelo ídem. Mister teta es un amigo...esteee bueno lo de amigo es una forma de hablar, este es como el Guadiana. Tampoco he intentado nunca llamarlo en caso de urgencia pero no es que me fie mucho de él en ese aspecto, igual hago mal, pero desde luego para fiestas, risas y demás para eso sí que confío en él. Aunque siempre que he hablado con él en un momento de bajón ha conseguido devolverme la sonrisa...algo es algo.
Pero bueno yo no venía a hablar de lloros madrileños que en serio me importa lo mismo que me pueden doler las almorranas de Rajoy...o sea nada, cero, negativo, incluso me darían placer si me enterara de que las tiene y las pasa putas cada vez que se sienta.
No, yo venía a hablar de un toro, al que agarré por la cornamenta y ...que me he ido de casa! Que hasta los huevos...los huevos de las gallinas me he traído para hacerme una tortillita para cenar.
Siempre he estado bien en casa, tengo unos padres que pasan de mi como de la caca de perro, salvo si la pisan en ese caso no pasan, y a mi cuando me pisan pues me joden evidentemente no hay remedio, siempre hay algún roce en una convivencia, pero lo cierto es que no son los típicos padres que meten las narices en todo. De verdad es casi como estar en un hotel a mesa puesta...últimamente poco hacía la verdad. Al final me harté de mi comodidad. O sea que andaba medio amargada con mi pareja (bueno ex) porque él no parecía querer evolucionar e independizarse y resulta que voy y me doy cuenta de que la única culpable era yo. No sé como cojones llegué a esa conclusión leyendo
este post de Inma, supongo que porque esa era mi crisis existencial. El caso es que me he dado cuenta que independientemente de la edad la crisis que tenía ella a otros les llega antes de los 40, a otros a los 50...pero llega. Cada uno evoluciona a su manera y a todos nos acaba llegando, ya sea porque vemos que los demás van evolucionando y ya nos toca o porque lo sentimos y punto. Y si yo sentía la necesidad de largarme de casa debía hacerlo independientemente de lo que quisiera mi pareja, lo que pasa es que me imaginaba que iba a tener problemas e iba a seguir frustrada porque él poco a poco y sin darse cuenta acabaría viviendo en mi casa igual que en la de sus padres, como un marajá y yo no quería eso. Demasiadas pajas mentales, hasta que no lo pruebas no lo sabes, pero me lo pensaba tanto y tanto...que con todas esas negatividades lógicamente no me apetecía.
Al final lo dejamos...y al cabo de mes y pico me voy a ver un piso, precioso, soleado, acogedor, zona tranquila. Pero me quedo pensando...y decido que no, le digo a la chica que no espere por mi que siga enseñando el piso y si tiene otra oferta que la coja pero si cambio de opinión la llamo. Al final me leí el post de inma y llamé a la arrendadora para decirle "sí quiero". Así sin pensarlo dos veces agarré el toro...o más bien el petate...LOS petates...joder qué de ropa tengo!
El sentimiento estos días cada vez que volvía a casa de mis padres era de agobio, como que algo me ahogaba, supongo que por el hecho de estar pensando "qué más tengo que llevarme?". Pero lo curioso es que se me fue una especie de sensación rara que me subia por el pecho hacia la garganta, parecía como que se me iba a salir el corazón por la boca. Llevaba un par de semanas o más con esa cosa rara y cuando me dispuse a llamar para reservar el piso se hizo más aguda, para luego desaparecer. Mientras llevé todas mis cosas lo pasé un poco mal, agobiada, medio asustada, sin saber cómo lo llevaría...pero enseguida se me pasó, había tanto que hacer, que se me olvidó pensar, comer y hasta beber...vamos que si ya había adelgazado ahora más...ya me están llamando la atención al respecto. Menos mal que por fin estoy asentada y ya puedo comer.
Los primeros días nadie sabía nada salvo mis amigas y mis padres, por el tema de que no sabía si no me arrepentiría y saldría huyendo pero finalmente lo he ido contando porque me veo bien, estoy agusto, claro que llevo a penas una semana y estoy casi siempre acompañada, veremos después cuando se pase el jaleo.
El caso es que yo no me ando con hostias, a veces me pienso mucho las cosas, en el fondo me apetecen pero no las hago porque pienso, y siempre que pienso son cosas negativas, mientras que cuando voy a lo loco y a toda leche lo que hago es darme motivos para hacerlo, o digamos que justo en el momento en el que tengo pensamientos positivos al respecto de algo me apresuro a hacerlo. Lo curioso es que luego cuando me paro ya no pienso en "ay...no me arrepentiré?" no solo pienso en cuál es el siguiente paso y lo que tengo que hacer. Y puede parecer una tontería todo eso para cualquiera que lleve desde los 20años independizado pero me da igual, para la humanidad es una mierda para mi es una gran zancada. Ahora solo queda ver como me va la convivencia...conmigo misma!
 |
Acabaré sepultada bajo una torre de pizzas? :P |
P.D. A ver cuánto tardo en dejar el "conmigo misma" que esa es otra...lo mismo no duro sola ni un mes...